En 1980, Charly Garcia (estrella de rock de profesión), seducido por el trabajo de una joven artista plástica de vanguardia ligada al no menos vanguardista Instituto Di Tella, le ordenó a su entorno que acomodara la sala mayor del palacete: “quiero un retrato para la tapa de Música del Alma”. La encargada? Renata Schussheim.
“Me renatizó completamente”, dice García sobre la obra que ilustra la portada del disco, una rareza grabada en vivo durante el Festival del Amor, realizado en noviembre de 1977 y del que participaron Leon Gieco, Raul Porchetto y David Lebon, entre otros. “Renata fue la primera de su especialidad. Y nos amamos. Ella me abrió una puerta muy importante tanto artística como espiritualmente. El único problema con Renata son los malditos muñecos. A ella le encantan y a mi me dan miedo”, confiesa Charly.
El dibujo de Garcia, con su melena y el bigote bicolor, los lentes oscuros y los “muñecos malditos” a su alrededor, fue el primero de una extensa lista de trabajos conjuntos entre los dos artistas (luego Schussheim se encargaría de varias escenografías, videoclips e incluso del look gomina de Garcia en tiempos de Piano Bar. “Este dibujo me lo pidió al poco tiempo de conocerlo - recuerda Renata -. Yo estaba encandilada por su imagen y su espíritu. En el retrato está mi mas sublime idealización y afecto por Charly. es mitad homenaje, mitad prueba de amor. Fue en un periodo en el que trabajaba solo en blanco y negro y lo hice todo con plumín”.
El álbum doble finalmente se editó tres años después de aquel multitudinario concierto. “El dibujo es bárbaro. Me enchufó una borboneta con una mariposa, una especie de pin. Es genial. En lo suyo Renata hace Chopin”.
“Me fascinaba su música y le pedí a Carlos Cutaia, que había tocado con Charly en La Maquina de Hacer Pajaros, que me lo presentara de inmediato. Estaba enamorada de ese flaco desgarbado”. En 1982 Schussheim se encargó de la escenografía para la presentación de Yendo de la cama al living, con bombardeo pirotécnico a Buenos Aires incluido. Luego dirigiría el videoclip de “Estoy verde (no me dejan salir)” y en 1985 , en un proyecto escénico-actoral sin precedentes para el genero, se unió a Jean Francois Casanovas para crear el espectáculo alrededor de la presentación del álbum Piano Bar.
“A todo volumen. Historias de tapas del rock argentino”. Sebastian Ramos.
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